Gavin Newsom, gobernador de California, se negó a aprobar un proyecto que pretendía beneficiar a inmigrantes que durante años han pagado impuestos en el estado para acceder una lotería donde podrían recibir un préstamo por el 20% del valor de una casa.
Aun cuando carecieran de la documentación necesaria para acreditar su estancia en el país, los beneficiarios podrían aspirar aun préstamo con un monto máximo de $150,000 dólares.
El mes pasado, ambas cámaras de la Legislatura de California controlada por los demócratas aprobaron el denominado Proyecto de Ley 1840 de la Asamblea.
Dicha iniciativa pretendía otorgar a los inmigrantes en situación irregular en el país acceder al programa de préstamos hipotecarios financiado por los contribuyentes californianos, el cual brinda apoyo para el pago inicial para los compradores que por primera vez son elegibles para adquirir un techo donde vivir.
Sin embargo, el demócrata que lleva cuatro años al frente de la administración estatal con un déficit presupuestal estimado en $46 mil millones de dólares, se negó a comprometer más el presupuesto estatal y por ello rechazó el proyecto.
“Dada la limitada financiación disponible para los programas, la ampliación de la elegibilidad debe considerarse cuidadosamente dentro del contexto más amplio del presupuesto estatal anual para garantizar que administremos nuestros recursos de manera eficaz. Por esta razón, no puedo firmar este proyecto de ley“, escribió Newsom en un memorándum dirigido a los legisladores de California.
Cabe señalar que, antes de su veto, el Proyecto de Ley 1840 ya había sido criticado por los republicanos al considerarlo contraproducente.
Mediante un mensaje publicado en la plataforma X, anteriormente conocida como Twitter, Jim Desmond, supervisor del condado de San Diego, se opuso al controversial proyecto
Ampliar los préstamos hipotecarios financiados por el estado para incluir a los inmigrantes ilegales no es simplemente otra dádiva: es una extralimitación masiva que traslada la carga financiera a los contribuyentes respetuosos de la ley“, indicó.
Al rechazo también se sumó Kate Sánchez, asambleísta republicana por el Distrito 71 (Rancho Santa Margarita).
“Un millón de californianos viven en la pobreza extrema y 180.000 no tienen hogar… Esta es una traición increíble a los ciudadanos de este estado“, señaló en la misma plataforma.
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