Este 15 de abril comienza el juicio al expresidente Donald Trump en la corte criminal estatal de Nueva York, donde enfrenta 34 acusaciones por la falsificación de registros comerciales al pagar $130,000 a la estrella porno Stormy Daniels.
El caso no es por el pago en sí a la actriz porno, para que no revelara la presunta relación que sostuvo con Trump en 2006. El juicio es por movimientos financieros sospechosos para hacer efectivo el desembolso del dinero durante la campaña presidencial en 2016.
Será la primera vez que un expresidente de los Estados Unidos sea juzgado por delitos graves que podrían llevarlo a prisión, quizás a Rikers Island, en Nueva York.
Los juicios anteriores fueron de carácter civil, como la acusación de violación y desprestigio moral contra la escritora E. Jean Carroll y por los fraudes en la Organización Trump. Ambos casos derivaron en castillos millonarios.
La acusación del fiscal de Distrito de Manhattan, Alvin Bragg, acusa a Trump de presuntamente cometer un delito, para ocultar otro, además de considerar que el republicano ocultó información perjudicial a los votantes antes de las elecciones presidenciales de 2016.
Los abogados que lideran la defensa de Trump son Todd Blanche y Susan Necheles.
Michael Cohen como testigo estrella
El testigo estrella del juicio podría ser Michel Cohen, el exabogado personal de Trump, quien operó el pago a Daniels, y quien logró un acuerdo con fiscales federales para rendir testimonio.
Cohen incluso enfrentó cargos –y continúa cumpliendo una condena domiciliaria– por haber hecho pagos, violando reglas de campañas, ya que se creó una empresa fantasma a la cual se abrió una cuenta bancaria para procesar el pago.
Hubo transacciones bancarias adicionales para concretar el pago a Daniels, a través de su abogado.
¿Y qué tiene qué ver Trump en esto? Según la acusación del fiscal Bragg –a quien Trump acusa de corrupto y de perseguirlo políticamente– el republicano acordó con su exabogado el pago mensual del dinero, montos que se hicieron a través de la Organización Trump bajo el concepto de “servicios legales”.
Hay otros pagos relacionados con el caso, como el hecho a la exmodelo de Playboy, Karen McDougal, quien recibió $150,000 dólares por parte del editor de National Enquirer, a fin de callar una relación que habría tenido con Trump en su hotel cerca de la sede de las Naciones Unidas.
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